Ya todo está dicho
marzo 3, 2025
¿Dónde reside la originalidad?
Estaba escuchando a uno de mis músicos favoritos; Gustavo Cerati y recordé la influencia que ha tenido en la música en español desde los 80’s hasta la actualidad.
Hace unas semanas salieron las primeras piezas del modelo más económico de PRS la “SE CE Standard 24 Satin” (debieron pensar un nombre más corto) y eso obviamente atrajo la atención de muchos principiantes en la guitarra. Quería conocer estos modelos y fui a uno de los show-rooms donde básicamente puedes probar cualquier modelo que quieras. Ahí me encontré a un chavito de unos 12-13 años tocando canciones de Cerati y queriendo ser como él. No lo culpo ¿saben? Yo también quisiera el talento de componer, arreglar, producir, tocar la guitarra y cantar al mismo tiempo como si fuera un paseo por el parque. Este músico argentino, aunque para muchos fuera un ser bastante amoroso, talentoso e inspirador, para mí es muy difícil no pensar en que lo que hizo con su vida, el control en el consumo de sustancias “felices” (como diría Bob Ross) y su relación familiar con su hija, amigos y su concepción de “autocuidado” no hace que sienta ni la más mínima envidia de haber estado en sus zapatos. En fin, todo esto lo pensaba mientras este chico tocaba “Un millón de años luz” con ese riff que acompaña toda la canción y aunque no podía decir que lo tocaba adecuadamente, la manera en que se sentía inspirado y motivado era de reconocerse.
¿Cómo separar el arte del artista?
Probablemente este niño ni siquiera conoce el momento oscuro por el cual Gustavo transitó los excesos ni la vida descarrilada que lo orilló a tener el accidente cerebrovascular que lo puso en coma, ¿algún día lo sabrá? ¿Será esta una razón para decirle que mejor buscara otro tipo de “héroe”? Nunca sabremos si para este tipo de genio musical era necesario pasar por una vida así de amarga para crear toda su obra. Algo que siempre me ha causado intriga de un tiempo para acá es cuando reconoces la obra de algún artista que no tiene una vida “políticamente correcta” o peor aún, fuese quizá un personaje nefasto y por ello la gente pudiera descalificarla sin que la obra en sí tuviera la más mínima culpa.
Hoy en día me parece que entre nosotros impera esta cultura del “auto-cuidado mediático” el cual consiste en una consciencia, cuidado y trato hacia los demás con un diseño meticuloso. Ya no nos fijamos en que la gente no sea terrible sino que no lo parezca. En un mundo hiper-vigilado, sobreinformado y con una ética relativista, los artistas están creando en tanto querer ser aceptado y no sé qué tanto en cuanto a impulso creativo.
Las disrupciones de hoy en día parecieran ser sacados de un refrigerador y calentadas en un horno listas para preparar la siguiente “transgresión” artística. No significa que no existan destellos de propuestas alternativas y originales sino que cada vez más se encuentran aplastadas por una sobre-oferta que impera en el mercado de la música actualmente.
Me cuesta trabajo pensar en cuál sería la contracorriente actual del mundo musical, no quisiera enterarme años después en un libro de historia y no haberlo vivido. Es tan fácil materializar una canción, un disco, un video que el contenido pasa a segundo o tercer plano. Ahora los valores se miden en la complejidad, tendencia e idealismo. Quizá lo de hoy en día es tener como artista una vida alejada del autocuidado mediático y más bien preocuparse en si ser fiel a lo que se quiere crear sea cual sea tu vida y entorno.
La búsqueda hoy en día de la originalidad no reside en crear lo -no creado- ni encontrar el hilo rojo. Pienso que la originalidad hoy en día está en cautivarse a uno mismo y a los demás con las cosas que sí importan. ¿Ustedes dónde encuentran una chispa de originalidad hoy en día?